Muchos se sorprenden del color marrón de los acabados de la carpintería de puertas y ventanas de las ciudades en España. Cuando se ha tenido la oportunidad de restaurar esas carpinterías eliminando las capas sucesivas de pintura, muchas veces se descubre un color rojizo de la madera que tiñe las maderas nacionales (pino fundamentalmente).Es el mismo color rojizos de las maderas de las plazas de toros.Y también el color de las casas de madera nórdicas.
Se trata de un tratamiento-acabado para la madera a la intemperie muy eficaz.
Consiste en una mezcla de aceite de linaza cocido junto con tierra de óxido de hierro (almagre) y esencia de trementina.
Su composición es del orden del 60 % de tierras, 32 % de aceite de linaza y 8 % de esencia de trementina que actúa como secante.
Con el tiempo ese color rojizo, se transforma en marrón por la acción de la radicación solar y por eso se tendía luego a repintar esas carpinterías con ese color, acumulando varias capas a lo largo del tiempo.
Fuente:
Bernardo López
TAMAT
Experto en restauraciones de madera