Texto de la directiva
Esta Directiva establece que la concentración del polvo de la madera en el aire debe ser menor de 5 mg/m3, si bien esta cifra no quiere decir nada porque no hay un método de medida común del polvo a nivel europeo. Esta Directiva deberá ser traspuesta a nuestra legislación antes del 2003, se publicó en el DOCE del 1.6.1999, páginas L138/66 a 69..
En la directiva se menciona como fuente bibliográfica para las maderas de frondosas, la publicación: Volumen 62 de las monografías sobre evaluación de los riesgos carcinogénicos para las personas, “Serrines y formaldehído” (Wood Dust and Formaldehyde), publicado por el Centro Internacional de Investigación sobre el Cáncer, Lyon 1995
Como información adicional se incluyen, las fases para la mejora de un circuito de extracción de polvo son las siguientes:
1.- Identificar los puestos de trabajo más contaminantes por el polvo. Observar la naturaleza del polvo (si procede de madera maciza, tableros de partículas o de fibras, etc), el proceso por el que se crea el polvo (aserrado, cepillado, lijado) y la calidad de la captación.
2.-Mejorar la captación. Se ha de colocar el captador situado lo más cerca posible del punto donde se emiten las partículas de serrín y polvo, la aspiración debe hacerse en el sentido de la eyección del polvo.
3.- Disponer de una aspiración que asegure una captación eficaz que procure una velocidad del aire para el transporte del serrín y polvo hasta el silo. La velocidad que podría recomendarse sería de 20 - 25 m/s. Para ello se aconseja que las tuberías sean lo más cortas posibles, que cuando las máquinas están paradas se pueden cerrar los registros de ellas, que los ventiladores están bien dimensionados y que los filtros se limpien regularmente.
4.- Se debe evitar reciclar el aire, sólo cuando por razones de ahorro de energía debe hacerse, hay que asegurarse que es puro (menos de 0,2 mgr/m3), sólo hacerlo en el invierno, asegurar un aporte de aire nuevo de 60 m3/hm y por persona en el taller, instalar un corta-fuegos en el circuito que limite los riesgos de explosión ligados a las atmósferas pulverulentas.
Cuando hay puestos de trabajo difíciles de mejorar se aconseja aislarlos del resto de la nave (caso del lijado con lijadoras portátiles) y proteger a la persona con equipos individuales (mascarillas etc). Conviene limpiar los puestos de trabajo para que no se acumule polvo en el suelo, máquinas y los alrededores.